Un llamado a la unidad en este 17 de octubre
El Día Mundial para la Erradicación de la Pobreza Extrema fue celebrado este 17 de octubre de 2013 en el barrio 25 de Julio de la ciudad de El Alto, con la participación de diferentes miembros del Movimiento ATD Cuarto Mundo y vecinos del lugar.
Esta conmemoración se inició a las 10:00 de la mañana en nuestra “Casa de la Amistad” con la realización de una marcha cultural que recorrió varias calles de la Zona de Senkata, hasta llegar a la Plaza 25 de Julio. Esta marcha fue reuniendo a su paso a cada vez más vecinos ante la mirada extrañada y sorprendida de los transeúntes. Entre sus filas también se encontraban miembros de instituciones amigas que llegaron de muy lejos para unirse en esta movilización ciudadana.
Baile, declamación y palabras emotivas fueron los números que se llevaron a cabo en el evento central programado hasta mediodía. “Tenemos que unirnos” fue el llamado de la señora Luisa Mita, quien desde su realidad difícil se compromete cada día a ayudar a que familias que viven en pobreza y exclusión puedan romper el silencio y unirse en comunidad y hermandad.
La culminación del acto central, no fue sino solo el inicio para apreciar la belleza del arte y el valor del conocimiento del cual todos somos portadores. Esto se vio reflejado en la exposición de 34 pinturas al óleo creadas por manos de persona sumidas en pobreza durante el taller de adultos de la Casa de la Amistad. Estas obras de arte fueron expuestas a partir de mediodía en la Biblioteca Joseph Wresinski, a pocos pasos de la plaza 25 de Julio.
Además de ello, se proyectaron los tres videos documentales que ATD Cuarto Mundo realizó junto al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo Bolivia (PNUD), referidos a los Objetivos del Milenio (acceso a la salud, acceso a la educación y trabajo digno). Ello propició un debate interesante entre vecinos y algunos miembros de instituciones sobre la calidad de la educación y la salud en nuestro medio.
Este tipo de encuentros nos llama a cuestionarnos sobre nuestra realidad y sobre la violencia que genera la pobreza. Doña Juana Sarzuri, madre de familia de El Alto nos comparte su cuestionamiento: “Uno se pregunta por qué hay tanta pobreza, si estamos en un país tan rico, en todo aspecto”. Pero también encontramos gente que quiere comprometerse desde su realidad y sus capacidades a luchar contra la discriminación y la exclusión, uno de ellos fue Franz Ortiz, un comunicador que ayuda a jóvenes de ese barrio mediante talleres de teatro: “Hay harto que trabajar, me gustaría mucho coordinar con las instituciones o con otras personas que están con la misma sensibilidad y con el mismo ímpetu de erradicar la pobreza”.
Esta jornada se cerró con el tradicional “Apthapi”, que convoca a que cada uno de los presentes aporte algo de comida a una mesa común, con el fin de compartir lo mucho o lo poco que tenemos. Además de ello, no pudo faltar el baile que alegró y levantó de sus asientos a invitados y organizadores, sumidos todos en un espíritu de familia que se une para dar un grito unánime que rechaza la pobreza extrema.