Un legado de resistencia
Editorial de Isabelle Pypaert Perrin en la Revista Cuarto Mundo N°258 “Desvelar las dimensiones ocultas de la pobreza”.
Tengo presentes estas palabras de Pape Mody, comprometidos con los niños y las niñas en Dakar:
“Lo importante para mí es participar de la liberación de los demás. Sólo tengo una lucha: rechazar la miseria.”
Pape Mody es uno de esos jóvenes que han heredado de sus padres un mundo de humanidad surgido de las profundidades de la miseria, moldeado por días y días de rechazo a ser considerado un nada. De niño, se impregnó de la sensibilidad de sus padres, de su valor, de su visión sobre aquellos que los rodeaban. Recibió lecciones de vida diarias: no podemos rendirnos, debemos ganarnos la vida día tras día para nuestros hijos, ¡no abandonemos a los que sufren a nuestro lado! Sus padres conocieron el Movimiento ATD Cuarto Mundo cuando él, de niño, participaba en la biblioteca de calle de su barrio. Descubrieron que no estaban solos, que en otras partes del mundo otras personas padecían la desgracia. Vivían la misma lucha, el mismo rechazo a que los seres humanos fueran pisoteados.
Esta dimensión de la pobreza – el sentido del otro arraigado en el corazón de las familias a las que el mundo presta poca atención – permaneció oculta hasta que Joseph Wresinski nos la reveló. Él mismo se veía como el heredero de sus padres, de su madre, de su entorno. Cuando un periodista le preguntó en 1987 qué había ganado en 30 años de lucha, respondió:
“Lo que hemos ganado es que, hoy, una generación sabe que sus padres fueron luchadores contra la pobreza, una generación sabe que sus padres lucharon contra la pobreza y no la sufrieron.”
Pape Mody no está solo. Hoy en día, otros jóvenes se comprometen con en el Movimiento ATD Cuarto Mundo, apoyándose en esta herencia. Estos jóvenes tienen en su interior una preciosa fuente de conocimientos a la que pueden recurrir constantemente para discernir lo que ocurre, para mantener el difícil rumbo de poner a los más pobres en primer lugar y para orientar sus opciones de acción.
Provistos de esta historia, podemos leer la investigación sobre las dimensiones ocultas de la pobreza, no sólo para descifrar mejor la pobreza sino también para inventar luchas y acabar con la persistencia de la miseria.
Podemos reconocer que los padres que hoy viven en la pobreza tienen un poder de acción sobre el cual que podemos respaldar nuestras acciones. Se convertirá en un legado para sus hijos y las generaciones futuras.