En las Naciones Unidas, ATD Cuarto Mundo, en colaboración con otras ONG, organiza reuniones informales sobre temas relacionados con la pobreza, el desarrollo sostenible y la Agenda 2030 de las Naciones Unidas. La serie de diálogos que lleva por título «No dejar a nadie atrás» siempre cuenta con oradores que tienen una experiencia de vida sobre el tema que se aborda.

En febrero de 2017, el tema que se trató fue «Menores privados de cuidado parental o en riesgo de perder dichos cuidados». Los oradores que participaron fueron:

• Mianna Dellar, joven de 17 años con experiencia directa de acogimiento alternativo.
• Sra. Sofia García García, representante de Aldeas Infantiles SOS Internacional ante las Naciones Unidas.
• V.E. Sr. Jan Kickert, Embajador, Extraordinario y Plenipotenciario, Misión Permanente de Austria ante las Naciones Unidas.

La Sra. García García, en su introducción a la reunión, recordó que con frecuencia los menores privados de cuidado parental forman parte de los grupos de menores más olvidados y abandonados en materia de políticas e inversión.

En términos de esfuerzos políticos y buenas prácticas, Austria siempre ha abogado por los derechos de los menores. El país se implicó activamente en la promoción de las Directrices sobre las modalidades alternativas de cuidado de los niños de las Naciones Unidas. La reunión incluyó los informes de los esfuerzos realizados por Austria para mejorar los programas e instalaciones alternativas de acogimiento, así como el intento por trasladar más menores desde estas casas a estos centros de acogimiento. Existen una serie de desafíos a la hora de apoyar el tránsito de menores desde la acogimiento familiar o comunitario hasta la vida independiente. Un importante problema es la gestión del número creciente de menores no acompañados y refugiados.

Los asistentes mostraron su acuerdo sobre la necesidad de que las Naciones Unidas sigan invirtiendo en la infancia puesto que son los futuros embajadores del mundo. Los menores en situación de acogimiento necesitan más apoyo que quienes viven con sus madres y padres. Esto es especialmente cierto en lo que respecta al desarrollo emocional, pues estos menores han aceptado su pasado para progresar en la vida. Los Gobiernos desempeñan un papel muy importante en este sentido. Los menores en situación de acogimiento no aprenden algunas de las habilidades esenciales que los padres y madres normalmente enseñan, como abrir una cuenta en un banco. Así pues, es necesario llevar a cabo programas de adquisición de competencias para la vida activa que garanticen que las y los jóvenes privados de cuidado parental no se quedan rezagados en esas áreas. La pobreza con frecuencia es un problema generacional. Para poder adoptar soluciones efectivas es necesario brindar confianza y apoyo emocional tanto a los menores como a sus educadores.

Los puntos principales del diálogo fueron:

• Un menor que pierde a sus padres también pierde su primera línea de protección.
• Es importante prevenir las separaciones innecesarias entre padres y madres y menores.
• Todos los menores y jóvenes que carecen de cuidados parentales necesitan tener oportunidades para convertirse en miembros autónomos de la sociedad. Tienen derecho a vivir en un entorno de apoyo y promoción.
• La educación no es lo único importante, también el apoyo emocional es clave para menores que carecen de cuidados parentales.
• Las y los trabajadores sociales con implicación directa con menores deberían recibir salarios adecuados y apoyo profesional porque su trabajo afecta directamente a la vida de los menores.

El diálogo concluyó con una nota positiva: el agradecimiento por este debate tan provechoso, y de un modo especial, por la participación de Mianna Dellar.

La importancia de prevenir las separaciones innecesarias entre madres y padres y menores es la base de la mayor parte de la labor realizada sobre la cuestión por ATD Cuarto Mundo en los diferentes países. Durante décadas en muchos países del mundo, entre otros: España, Francia y Suiza, así como en muchos países de Europa del Este y de Asia Central, la estructura familiar se ha visto sistemáticamente socavada por la separación de los menores de sus familias simplemente porque las madre no estaba formalmente casada o porque la familia vivía en situación de pobreza. Estas situaciones se describen con mayor detalle en el artículo «Children Separated from their Parents: A Conspiracy of Silence and Violence [Menores separados de sus padres y madres: conspiración silenciosa y violenta, disponible en inglés].

• «Bajo el pretexto de defender la moralidad o la lucha contra la pobreza, la sociedad y las políticas públicas, durante décadas, han tratado a la mayoría de las familias vulnerables de manera absolutamente inhumana, privando a miles de menores del cariño de sus padres y madres».

En marzo de 2016, la Universidad Popular Cuarto Mundo en Bélgica reveló que las personas que viven en situación de pobreza consideran que los servicios de protección y los centros de menores con frecuencia son más prejudiciales que beneficiosos, sobre todo cuando las familias se esfuerzan por mantenerse unidas. La institucionalización daña el desarrollo de las y los menores, y el abuso y la negligencia pueden producirse en los centros de menores donde el seguimiento de los mismos por parte de los servicios sociales es menor que cuando viven con sus padres y madres.

Durante muchos años, ATD Cuarto Mundo ha hecho hincapié en la importancia que reviste el apoyo a las familias en sus esfuerzos por criar y educar a sus hijas e hijos (Véase How Poverty Separates Parents and Children [Cómo la pobreza separa a los niños de sus padres] y «An Ounce of Flesh Taken From My Heart [Me han robado unos gramos de corazón]»). Mediante la recopilación de la experiencia y la historia de las familias en muchos países, ATD Cuarto Mundo ha demostrado los efectos perjudiciales de la separación de los menores de sus familias.

Proyectos como la Casa Familiar de Frimhurst en el Reino Unido ofrecen un apoyo en un lugar donde las familias pueden descansar, vivir tiempos de calidad juntos, aprender nuevas capacidades y conocer a otras familias que se encuentran en la misma situación, todo ello en un clima de respeto y donde no se sienten juzgados. La labor que ATD Cuarto Mundo desarrolla en muchos países demuestra que, si se reúnen las condiciones apropiadas de apoyo, las madres y los padres en situación de riesgo de separación de sus menores pueden tener éxito en su labor como padres. Un aspecto fundamental para este apoyo es proporcionar un clima donde las madres y los madres no estén sometidos a una vigilancia intrusiva, bajo sospecha y tratados con una condescendencia perjudicial únicamente porque viven en áreas pobres. La obra Cómo la pobreza separa a los niños de sus padres plantea una pregunta fundamental.

• «Este tipo de proyectos ponen de manifiesto los numerosos esfuerzos ocultos que las y los menores en situación de pobreza y sus padres y madres realizan para mantenerse juntos. Si la determinación de las madres y padres y de los menores en situación de pobreza para vivir juntos es tan fuerte, ¿qué pasaría si pusiéramos esta aspiración en el centro de nuestras políticas de lucha contra la pobreza?. Construir a partir de esta aspiración de las madres y los padres a vivir juntos, ¿permitirá poner fin a la extrema pobreza de una vez por todas?
  (Tomado de el sitio web de ATD Cuarto Mundo USA.)

ATD Cuarto Mundo organizó este diálogo «No dejar a nadie atrás» juntamente con Aldeas Infantiles SOS Internacional y la Comunidad Internacional Baha´í; con el apoyo de la Misión Permanente de Austria ante las Naciones Unidas.