Mary Rabagliati y las personas que el mundo olvida
¿Quién es Mary Rabagliati? Diana Skelton, voluntaria permanente de ATD Cuarto Mundo conoció bien a esta singular mujer e intenta responder a esta pregunta en el libro que se publicará en 2018, «La revolución tranquila: Historia de Mary Rabagliati y las personas que el mundo olvida».
La historia de Mary Rabagliti se cuenta en una serie de vídeos editados siguiendo el formato de los vídeos «draw my life» [Pintando mi vida]. Los vídeos «draw my life» permiten conocer la vida de una persona gracias a una voz en off que relata su vida al tiempo que una serie de dibujos que ilustran el contenido se suceden en pantalla.
Descubra aquí el primer vídeo sobre la historia de Mary Rabagliati, una de las primeras voluntarias que se sumó a Joseph Wresinski en los inicios del Movimiento ATD Cuarto Mundo en Noisy-le-Grand.
Extracto del libro «La revolución tranquila: historia de Mary Rabagliati y las personas que el mundo olvida »
«Ahora que celebramos el 60.ª aniversario de la creación del Movimiento ATD Cuarto Mundo, recuerdo el año 1968, cuando integré el Voluntariado Permanente de esta asociación. En aquel momento preparábamos el 30.ª aniversario de su creación. Yo tenía entonces veinte años y no entendía muy bien el motivo de tanta celebración, pues pese a muchos años de esfuerzos, la extrema pobreza seguía constituyendo una realidad cruel de la vida. A mi compañera y también voluntaria, Mary Rabagliati, le exasperaba mi pregunta, a la que contestaba:
- «Cuando estamos atrapados en situación de miseria, la alegría, ¡es algo aún más importante!. Cada día tendríamos que encontrar motivos para festejar, para crear proyectos de viajes o simplemente para bailar. No tendríamos que hacerlo «pese a la pobreza», lo hacemos para que las personas que se ven excluidas de la economía y de la sociedad puedan finalmente participar en todo lo que hace este mundo extraordinario».
Como yo, Mary integró el Voluntariado Permanente de ATD Cuarto Mundo a los veinte años. Era en 1962, algunos años después de que Joseph Wresinski comenzara a solicitar el compromiso de voluntarios para venir a compartir la vida del asentamiento precario de Noisy-le-Grand, en Francia. Mary formaba parte de ese pequeño puñado de co-fundadores que colaboraron estrechamente con él durante años y que, con él, crearon un movimiento internacional. Gracias a su personalidad, enérgica y radicalmente sincera, inspiró el compromiso de personas de muy diferente medio social. Vivió junto con familias en situación de pobreza en Francia, en Estados Unidos de América y en su país natal, el Reino Unido. Inició muchas de las relaciones que ATD Cuarto Mundo estableció en las Naciones Unidas y en África.
Murió trágicamente a los cincuenta y un años de edad, en 1992. Una de sus responsabilidades en ATD Cuarto Mundo fue la publicación de libros y boletines informativos que permitían al público formarse ante el desafío de la extrema pobreza. Sin embargo la mayoría de los escritos que publicó lo hizo bajo el anonimato, o traducido a partir de lo que Wresinski u otras personas habían escrito en francés. Con motivo del 60.ª aniversario de la creación de ATD, he querido volver a sacar a la luz la voz tan particular de Mary. En la década de los sesenta, Mary fue una de las primeras en contribuir a la creación de los archivos de ATD Cuarto Mundo, y gracias a su trabajo, pude volver a encontrar sus escritos en nuestros archivos, actualmente reunidos en el Centro Joseph Wresinski en Baillet-en-France (Francia).
Su correspondencia, sus informes y sus entrevistas me fascinaron. Al leer lo que escribió sobre el año que pasó en EE.UU. en el periodo de la Guerra contra la Pobreza y sobre el movimiento por los derechos civiles, entendí mejor por qué Wresisnki mismo decidió inspirarse en esta experiencia para la creación de ATD Cuarto Mundo. Le inspiraron el compromiso apasionado de personas y de grupos tan diversos, pero por el contrario, estaban completamente decididos a evitar el peligro que representa la falta de una estrategia coherente.
Asimismo, Mary participó en las tres conferencias mundiales de las Naciones Unidas sobre las mujeres, en México en 1975, en Copenhague en 1980 y en Nairobi en 1985. Yo misma representé a ATD Cuarto Mundo en diferentes conferencias de las Naciones Unidas y me impresionó su sentido táctico. En la primera conferencia, ATD Cuarto mundo no estaba habilitada para poder dirigirse oficialmente al cuerpo diplomático. Mary, junto con otra voluntaria permanente, iniciaron trámites en los hoteles de cinco estrellas donde se alojaban los diplomáticos (ellas mismas no se podían pagar el hotel y dormían en el sofá de una amiga). Convencieron a decenas de camareras y a miembros del personal de limpieza del hotel para que colaborasen con ellas en la distribución del manifiesto de ATD Cuarto Mundo en las mesas de recepción y en las habitaciones. Mary se reunió con cientos de mujeres de todo el mundo y correspondió con ellas por correo durante los siguientes años.
En la Cumbre de Copenhague, fue invitada a pronunciar un discurso oficial. Habló sobre las tres formas principales de exclusión de las que son víctima las mujeres que viven en situación de extrema pobreza.
«En primer lugar, se ven excluidas de las ideas que circulan entre nosotras y nos proporcionan identidad y fuerza, y la convicción que tenemos un lugar en el mundo y una contribución que realizar en favor de la igualdad, del desarrollo y de la paz. Además, estas mujeres se ven excluidas de los nuevos modos de vida. El desarrollo permite niveles de vida mejores, pero exige como contraparte estar a la altura de estos nuevos estándares. Actualmente, es completamente posible y legal, en Alemania Occidental, separar a una mujer de sus hijos excusándose en el hecho de que es iletrada y afirmando que no podrá ocuparse bien de ellos. Estas mujeres sufren una tercera exclusión en razón de los derechos humanos. […] Debemos prestar atención para no crear nuevas normas desde las que juzgar a las mujeres. A una mujer que no ha recibido educación, que no se encuentra en un buen estado de salud, que no logra contribuir como le gustaría al mundo, y que, sin embargo, lucha contra viento y marea para criar a sus hijas e hijos, no se la debe juzgar como alguien inútil e indigno.
- La solidaridad es unirse y luchar conjuntamente en favor de la dignidad de las mujeres en situación más grave de pobreza, por contribuir a su esperanza y su liberación. Mediante el cumplimiento de estos objetivos, podremos dar cumplimiento a los nuestros».
El discurso de Mary convenció a las participantes de esta Cumbre para la aprobación de una resolución propuesta por ATD Cuarto Mundo que garantizase, entre otras cosas: que todos los proyectos de desarrollo tomen en cuenta las necesidades de las mujeres en situación más grave de pobreza; que los informes gubernamentales de las Naciones Unidas sobre el estado de las mujeres hicieran hincapié en el avance de la situación de las mujeres en situación de extrema pobreza.
En la mayoría de sus escritos, Mary se dirige a Wresinski o a diferentes miembros del voluntariado permanente de ATD Cuarto Mundo. Algunas de las expresiones más fuertes, sin embargo, podemos encontrarlas en una entrevista realizada por Titinga Frédéric Pacéré, reconocido poeta de Burkina Faso. Tras la muerte de Wresinski en 1988, el Sr. Pacéré pensó que era importante aprender de estas extraordinarias personas que eran los más cercanos colaboradores del fundador. Durante su entrevista con Mary en 1991, afirma:
- «Nosotras, como voluntarias permanentes, no podemos esperar ser de ninguna ayuda si nos estancamos intelectualmente. Si permanecemos lamentándonos sobre todo lo que la pobreza tiene de terrible, entonces, no podremos hacer otra cosa que estancarnos, desecarnos, y no tendremos nada que ofrecer a nadie. Para poder aportar algo a las familias que viven en situación de pobreza, debemos convencerles de que se merecen participar del mundo. Que merecen poder acceder a la pintura y a la música. Que merecen las estrellas y todo lo que hay en esta tierra. […] Les invitamos a apoyarse en los voluntarios permanentes para poder realizar sus sueños. Estas familias portan en sí mismas la capacidad de crear sus propios proyectos y cambiar su destino».
Para dar a conocer los treinta años de compromiso de Mary junto a las personas en situación más grave de pobreza, he escrito un libro titulado: La revolución tranquila: la historia de Mary Rabagliati y las personas que el mundo olvida. Paul Marechal, también miembro del voluntariado permanente de ATD Cuarto Mundo, se ha comprometido asimismo a dar a conocer la historia de Mary. Gracias a su talento artístico, hemos empezado a seleccionar algunos capítulos para acompañarlo con una presentación audiovisual.