Dar-es-Salaam, Tanzania — Tras el seminario organizado en marzo y dirigido a jóvenes con el objeto de compartir experiencias exitosas y logros (véase artículo Jóvenes que saben como alcanzar a todas las personas ), varios participantes han seguido escribiendo sobre lo que han aprendido mutuamente.

Orna, Catedrática de la Universidad de Jerusalén, especialista del método Learning from Succes (Aprender del Éxito), vino a Tanzania para contribuir a que los participantes del seminario pudieran analizar su acción y su compromiso desde la perspectiva del éxito. Al principio de la formación dijo: «Cada persona experimenta algún éxito en la vida. Sabemos que ustedes trabajan en colaboración con otras personas, pero les preguntamos a cada uno de ustedes: ¿Qué es lo que han realizado personalmente? Alguno de ustedes puede decir por ejemplo: Invité a esta niña o niño a participar en la actividad, entonces le preguntaré: ¿Cómo lo hiciste, cómo les invitaste? Con nuestras preguntas queremos permitir poner de manifiesto el conocimiento de cada uno de ustedes —el conocimiento que emana de su propia experiencia.»

Romy es voluntaria permanente de ATD Cuarto Mundo y miembro del equipo internacional del Área de Acción-Conocimiento-Compromiso. Al evaluar el seminario, señalaba algunos elementos muy precisos: «Durante toda la semana, pudimos conocer los esfuerzos que cada persona hace para ser amiga/o de los sin amigas/os, al compartir su tiempo, sus aptitudes, creatividad y afecto. La exigente tarea que Orna nos pidió fue hablar únicamente sobre las cosas que podíamos visualizar nos ayudó a ver como, por ejemplo, Grace utiliza la canción con las niñas y niños y crea nuevas canciones a partir de sus mensajes. Pudimos comprender activamente como Christian organiza y anima un programa de radio semanal con niñas y niños Tapori muy escuchado por otras niñas y niños, madres, padres, docentes y en ocasiones, representantes políticos. Pudimos comprender activamente como Shafi guía a sus amigos para lograr que algunos delincuentes cesen los robos y las agresiones contra las mujeres en su vecindario. Pudimos contemplar mentalmente como Ally sostenía la mano dubitativa de un niño al dibujar. Seguimos a Pazi cuando llevaba agua hasta la casa de una pareja de ancianos, lo vimos sentado dialogando con el hombre, escuchando las historias que contaba sobre un remoto pasado que el joven Pazi desconocía antes.»

Hemed, miembro del equipo de ATD Cuarto Mundo en Dar-es-Salaam, Tanzania, escribe sobre las comunidades pobres donde las personas participantes del seminario realizaron actividades dirigidas a niñas y niños. «Entre nosotros no todas las personas tienen la misma fuerza, si damos la espalda a los débiles, ¿cómo podrán avanzar sin nosotros? […] he visto cómo los jóvenes [en este seminario] están dispuestos, durante meses y años, a permanecer con personas que viven en situaciones de extrema pobreza hasta crear lazos de confianza y conjuntamente poder superar cada paso«.

Según la reflexión de Christian, participante de la República Democrática del Congo: «El ejemplo de todas las personas jóvenes que participaron en el seminario me hace soñar, confío en que todas las personas jóvenes del continente africano se unan para dar respuesta al llamamiento del padre Joseph [Wresinski]. Nuestras acciones atraen a muchas personas jóvenes y queremos que otras muchas sigan su ejemplo, por eso que hemos creado un grupo en Whatsapp que nos va a permitir mantener mutuamente el contacto y el intercambio. También estamos contemplando la posibilidad de abrir un grupo Facebook. Así, vamos a seguir dialogando sobre nuestras acciones.»

Óscar, uno de los jóvenes tanzanos participantes en el seminario, afirmó: «Cuando regresamos tras el seminario a nuestras casas, el conflicto lo tuvimos en nuestra vecindad pues estaban seguros de que habíamos vuelto con algo en los bolsillos. Decían, tienes que haber conseguido algo [al menos lo suficiente] para comprar un refresco. Cuando les digo que no, ellos replican, «pierdes tu tiempo si regresas con las manos vacías». En la comunidad, si eres el primero en colaborar con quienes tienen necesidad, algunos preguntan, «¿eres familiar suyo? ¿Por qué eres la primera persona en acudir? ¿Por qué a ti te afecta más que a los demás?» Algunas personas tratan de desanimarte, pero yo no me desanimo, soy como una columna, utilizo mi fuerza, mi valor, mi mente. […] En este seminario he reafirmado la convicción de que es muy importante establecer relaciones de amistad con quienes no tienen amigos. Es algo importante y, para mí, esta convicción tiene un hondo impacto«.

Pazi, otro de los participantes de Tanzania, comenta lo siguiente: « El sufrimiento de las personas que viven situaciones de extrema pobreza puede reducirse si nos sumamos a ellas. Yo ayudo a llevar agua a una pareja de ancianos que vive en mi comunidad, no se trata únicamente de ayudarles, sino también que puedan ver que la sociedad se preocupa por ellos«.

Patrick, un participante de Kenya, dice, «ser amigo de quienes no tienen amigos no es una responsabilidad individual sino una obligación». Como jóvenes, el valor más duradero que somos capaces de ofrecer a nuestra comunidad es nuestra implicación y nuestro compromiso. Hay que intentar al máximo mostrar amistad con las personas que sufren marginación pues estas lo que necesitan no es tu dinero, sino ser aceptadas como seres humanos«.

Foto © ATDCuartoMundoTanzania